(Photo: Laurence Freeman, Bonneveaux, Francia.)
Lo importante de una tradición es que siempre está siendo renovada. Nunca está fija, nunca congelada. Las personas religiosas a veces pueden ser bastante conservadoras en lo que respecta a sus formas religiosas, a las instituciones, tradiciones y rituales, y algún nivel de continuidad, predictibilidad y conexión con el pasado creo es un aspecto verdadero de una tradición. Sin embargo, tenemos que estar constantemente adaptándonos, y es nuestra dimensión contemplativa de la fe la que permite que nuestras instituciones religiosas y nuestros sistemas de creencias religiosas se pongan al día frecuentemente. Como el cambio es tan rápido hoy en día, necesitamos que esa actualización sea cada vez más constante.
(La Dimensión Contemplativa de la Fe, Series Meditatio 2012B)